Dumortierita

COLOR:  Azul o azul-gris.

APARIENCIA: Piedra densa, polvorienta y moteada, con destellos iridiscentes e inclusiones azules o cristalinas.

RAREZA: Fácil de conseguir.

ORIGEN: EE.UU, Brasil, Namibia, Sri Lanka, Madagascar, Canadá, Francia, Polonia.

La dumortierita te hace más receptivo al contacto con los guías angélicos o espirituales. A nivel espiritual, te muestra el yo eterno arquetípico y te reconecta con la sabiduría innata. Puesta sobre la oreja, abre la clariaudiencia, y puesta más atrás, sobre los chacras vidas pasadas o soma, activa los recuerdos de vidas pasadas. Te lleva al principio del viaje de tu alma para examinar los contratos y acuerdos realizados a lo largo de los eones, y te ayuda a renegociarlos si ya no son aplicables. 

Puesta sobre otros chackras, esta piedra rompe los vínculos ya superados y facilita la rescisión de los votos. Identifica y libera causas de inquietud procedentes de otras vidas, de circunstancias difíciles o de las relaciones de la vida presente, poniendo de relieve las pautas que subyacen en las adicciones y compulsiones para reprogramar la memoria celular. Rompe el ciclo kármico de codependencia, ayudando a los cuidadores a darse cuenta de que ellos no pueden hacerlo por el adicto o por cualquier otra persona con conducta adictiva.

A nivel psicológico, te ayuda a confiar por ti mismo y a adaptarte a la realidad, ofreciendo paciencia o coraje; activa tu instinto de autopreservación instaurando una confianza innamovible. Calma el exceso de excitabilidad, promueve el desapego y abre al autoamor y a la alegría de vivir, ayudándote a mantenerte joven y con una actitud positiva. Resulta útil para los que tienen que lidiar diariamente con la crisis y el trauma, pues genera el calma y se enfoca en los esfuerzos por aliviar la situación. Si te sientes caótico y desorganizado, te ayuda a asumir el control de tu vida y a superar el miedo escénico, la timidez, el estrés, las fobias, el insomnio, el pánico, la depresión o la terquedad.

A nivel mental, la dumortierita fomenta la claridad y la autodisciplina, y potencia las habilidades organizativas, el enfoque y las capacidades lingüísticas para comunicarse con otras culturas; facilita un archivamiento eficiente. A nivel emocional, esta piedra estabiliza una relación complicada y atrae un compañero del alma, aunque en el proceso haya que aprender lecciones difíciles. La dumortierita ayuda a ver el valor de cada ser humano y las razones para la interacción. Resalta por qué eliges aprender a través de dificultades y desafíos, y te ayuda a dar las gracias a la otra persona por el papel que ha jugado en tu proceso de aprendizaje kármico.

CURACIÓN: Funciona mejor a nivel psicosomático, pero es beneficioso para la memoria celular, la hipersensibilidad, los desórdenes excretores, las quemaduras solares, la epilepsia, los dolores de cabeza, las naúseas, los vómitos, los calambres, el cólico, la diarrea y las palpitaciones.

POSICIÓN: Sostenla, crea entramados o ponla en el lugar apropiado.