APOFILITA

𝑪𝒐𝒍𝒐𝒓:Claro, blanco, verde, amarillento, melocotón 

𝑨𝒑𝒂𝒓𝒊𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂:Cristales cúbicos o piramidales; pueden ser transparentes u opacos; pequeños cristales a grandes conglomerados 

𝑹𝒂𝒓𝒆𝒛𝒂:Fácil de conseguir 

𝑷𝒓𝒐𝒄𝒆𝒅𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂:Gran Bretaña, Australia, India, Brasil, República Checa, Italia. 

𝑷𝒓𝒐𝒑𝒊𝒆𝒅𝒂𝒅𝒆𝒔: 

⚪ Tiene un alto contenido en agua, lo que la convierte en una eficaz conductora de la energía y portadora del registro akáshico. 

⚪ Su presencia e habitación potencia las energías, pues es una poderosa transmisora de energías. 

⚪ Crea una conexión consciente entre los reinos físico y espiritual. 

⚪Durante los viajes fuera del cuerpo, mantiene una intensa conexión con él, permitiendo que la información sea transmitida del reino espiritual al físico. 

⚪ Esta piedra espiritual potencia la clarividencia, estimulando la intuición y permitiendo acceder al futuro. Es excelente para la videncia. 

𝑃𝑠𝑖𝑐𝑜𝑙𝑜́𝑔𝑖𝑐𝑎𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒 

⚪Favorece la introspección, el análisis de la propia conducta y la corrección de los desequilibrios o fallos que se perciben. 

⚪ Permite abandonar la vanidad y rompe la reserva. 

⚪ Lleva a reconocer el propio yo y hace que se muestre en el mundo. 

𝑀𝑒𝑛𝑡𝑎𝑙𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒: 

⚪ Tiene un efecto calmante. 

⚪ Es una eficaz reductora del estrés, que libera bloqueos mentales y patrones de pensamiento negativos. 

⚪ Tiene el efecto de reducir el deseo. 

𝐸𝑚𝑜𝑐𝑖𝑜𝑛𝑎𝑙𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒 : 

⚪ Libera las emociones reprimidas. Supera la ansiedad, las preocupaciones y los miedos. 

⚪ Calma la aprensión y permite tolerar la incertidumbre. 

𝐸𝑠𝑝𝑖𝑟𝑖𝑡𝑢𝑎𝑙𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒: 

⚪ Calma y asienta el espíritu. Tiene fuertes conexiones con el reino espiritual y, al mismo tiempo, te permite sentirte cómodo dentro de tu cuerpo. 

⚪Facilita el recuerdo de vidas pasadas. 

⚪Imbuye el análisis y el proceso de toma de decisiones de amor universal para que la mente se sintonice con el espíritu. 

𝑪𝒖𝒓𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒄𝒐𝒏 𝑨𝒑𝒐𝒇𝒊𝒍𝒊𝒕𝒂: 

❣️Es considerada como la piedra "par excellence" para ayudar en la curación reiki 

❣️Permite llevar al paciente a un estado más profundo de relajación y receptividad, y, al mismo tiempo, quita de en medio al sanador para que la transmisión de energía sanadora sea más pura.